| Resumo | Se trata de analizar los tipos de censura y sus causas, para examinar a continuación la censura estatal, y la censura inquisitorial, con mención especial a la censura inquisitorial romana en el orbe católico.
Teniendo en cuenta que en la Edad Moderna existió una doble censura, la censura Real o Regia, la de la monarquía y del Estado, y la censura Inquisitorial, de carácter religioso, lo que se pretende es profundizar en las causas y diferenciación de ambas.
Así la estatal se justifica en mantener la ortodoxia en un Estado que asume como uno de sus fines la defensa de la fe, así como defender las regalías y derechos del rey. Mientras que la inquisitorial, a su vez, defiende la ortodoxia religiosa, es decir, persigue la heterodoxia.
Hay que tener en cuenta que en ocasiones la diferenciación entre ellas no es clara, pues la censura real o estatal, la civil, actuó por motivaciones religiosas y estuvo frecuentemente en manos de los obispos, y la censura inquisitorial fue aplicada muchas veces a quienes negaban los presuntos derechos del rey o del Estado confesional.
Hay que partir del hecho importante que la censura estatal es una censura previa, es decir, censura los libros antes de su edición o publicación, y la inquisitorial procede a censurar tras su publicación, una vez editado los libros.
En esta censura conviene detenerse en la realidad inquisitorial de en la Europa Cristiana en la que se desarrollaron dos tipos de Inquisiciones: en primer lugar, la papal o romana, creada en la Edad Media, que desde el norte de Francia y sur de Italia se extendió por parte de Europa y tuvo su sede en Roma y la llamada “Inquisición española”, o “Inquisición moderna” creada en 1478 a instancias de los Reyes Católicos por una bula del papa Sixto IV. La forma de actuación de ambas en el orbe católico, es lo que en esencia pretendemos plantear.
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